CLONES. Primera entrega. Hoy: Cuesta y Soria

Me pregunto por qué nos vamos a detener en haberle encontrado un parecido razonable a Terrazas habiendo tantos futbolistas en la plantilla. Iniciamos una serie difícil porque la búsqueda en algunos casos no la tengo resuelta. Tampoco es que ayuden las imágenes que hay en internet de nuestros jugadores. Algunos voy a tener que resolverlos con el hombre invisible o pasando por el microscopio las fotos que tengo de ellos.

Cuesta y Soria son los primeros invitados a este serial. El primero por el inigualable gol que le endosó al Real Madrid B. El segundo porque el foro, siempre sabio, lo ha elegido como el jugador de la jornada.

RC 7 - ROCKY MARCIANO

Cuesta es el arte. Como artista a veces es bohemio. Vive en su buhardilla parisina y, de repente, se levanta del camastro, agarra los pinceles y pinta Los Girasoles o Las Meninas. Luego se vuelve a acostar. Su parecido con Rocky Marciano es asombroso. Dudé porque también se da un aire a las estatuas griegas, puro arte en 3D. A Rocky Marciano se parece en más cosas que en la nariz y en la mandíbula. Porque RC7 te asesta un trallazo que te tumba en la lona a nada que te descuides. Si bajas la guardia te mete un croché y te dobla por la mitad, como al Castilla en Valdebebas, al que noqueó desde su buhardilla con una perfecta parábola que ya es Historia del Dépor.

JAVI SORIA - RON PERLMAN

Javi Soria es un jugador difícil de definir. Trabaja como un martillo pilón pero se atreve con el disparo, el cabezazo de ariete, el pase largo a lo Schuster... Su clon, Ron Perlman es Hell Boy, un diablo vicioso y rebelde que ayuda a los buenos aunque proviene de las filas enemigas, del mismo infierno. Por eso ahora está en el Dépor, al que llegó después de trabajar para nuestra bestia negra, el Conquense. Si Soria fuese minero en Asturias aparecería un día en Nueva Zelanda, con su pico y su pala, fresco como una lechuga y preguntando que dónde tiene que abrir el agujero de vuelta, por el que volvería a España cavando sin descansar.